martes, 14 de octubre de 2008


Yo te lo confese cuando te dije adiós : nací mujer buena, nací para servir a un hombre infeliz. Hasta que al fin la mano de dios desnudó mi pasión; tocó mi vocación, me descarriló hacia el barrio mental donde habitan las estrellas. Yo te lo confesé cuando te dije adiós : Que no iba a ser tu amor terminal, no podía mi vida acabar sepultando el ansia faltal de estar aquí,ya, cantandote ésto. Hasta que sucedió y me atreví a decir lo que el no esperó : Que me brota el deseo como anguila sin final cuando un amor llegue hasta tí a robarte la vida. No te olvides de tí, es la única salida.. eso no es amor, que se pudra ante mí que vea cóno brillo desde que lo dejé. Tengo el riesgo clavado en la piel y no quiero aliviarme.Y sola me quedé, borracha sin final. Y disfruté la jugada mortal, me vinieron ángeles a guardar, quitaron mi vestido anterior agitaron mi carne como un mar embravecido. Y este es mi camino, ésta si soy yo, abro mi pecho al viento, que me pegue sin piedad!

No hay comentarios: